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LA INSOPORTABLE MEDIOCRIDAD DEL SER

POR: Ana Galleta

Mientras Milan Kundera utiliza personajes “sólo como herramientas para dar su punto de vista en ´La insoportable levedad del ser´”, Ximena estiliza palabras y sonidos para descubrirse en “Mediocre”. Los protagonistas de ambas obras comparten una airosa despreocupación, pero además la pasión por la música, que los libera y abre las puertas del alma para entrar y hermanarse con el mundo.

Ximena, ¿cómo fue el camino previo a que viera luz este lanzamiento?
La inquietud sale a partir de que hice un tema para la película de “Niñas Mal”, que fue cuando vi que sí podía escribir mis canciones yo sola. A partir de eso entró casi inmediatamente la disquera y mi equipo de management al proyecto. Comencé a escribir temas y a prepararme para la grabación que se llevó a cabo en el verano del año pasado. Yo ya conocía a Tweety González que fue el productor de la mayoría del disco, porque nos habíamos contactado por My Space; le había gustado mucho mi trabajo y ya tenía él la inquietud de producirme. Me fui a Argentina con él un mes para trabajar en la producción y en la grabación. Después se sumó al proyecto Juan Campodónico, que es el productor de Jorge Drexler (y también la cabeza de Bajofondo junto con Gustavo Santaolalla) para que produjera tres temas. Y yo también lo busqué ahí por internet; lo conocía por Drexler porque soy muy fan, así que después me fui a Uruguay. Y finalmente a mezclar a Nueva York con el ingeniero que mezcló el último disco de David Bowie.

Ahora que lo mencionas, siendo parte de la generación que creció Internet, ¿qué otros beneficios ha aportado a tu carrera una herramienta como esta?
No pues… ¡todo! (risas). La verdad es que a través de medios como el My Space he podido conectarme con la gente y me sienten de alguna manera más cerca… finalmente la que checa la página, contesta los mails y pone los blogs ¡soy yo! Todo el tiempo es mi espacio. Y además por ese medio he descubierto músicos increíbles... ¡hay muchísimo talento ahí por descubrir! De hecho hay un ejemplo que es Leo Minax, un compositor brasileño que vive en Madrid; nos conocimos por My Space y nos gustó mucho nuestro trabajo y decidimos escribir una canción juntos, que finalmente viene incluida en el disco, se llama “No vuelvo más”. Ya hasta tengo proyectos para componer o trabajar con gente como Niña Dios y Jason Webley… ¡es impresionante!... Y finalmente, la música que estoy escuchando, la mayoría es del My Space más que de discos físicos.

Que de hecho en tu My Space hay un par de singles que no se incluyeron en este disco…
Creo que hay dos solamente que se quedaron ahí, que son “Through with love” y “Entre los dedos”… por el momento no hay planes para sacarlas, pero que a mí sí me gustaría que salieran, o por lo menos ponerlas para descarga. La verdad es padre y sí me gustaría mantener ese rollo del internet. Me gustaría seguir explotándolo como medio, porque siento que de alguna manera que de ahí salí, y es mucho el futuro que hay. Incluso está “Llovizna” que es de mi banda Feliz No Cumpleaños, que si se decide sacar el disco, pues ahí se incluirá.

¿Por qué te decidiste a no hacer un disco meramente jazz?
Porque el jazz no es lo único que escucho. Y en realidad a la hora de hacer música, no controlas lo que te sale; yo traté de ser lo más fiel a las canciones que me salían. Entonces solitas las canciones te piden lo que necesitan. A pesar de todo, sí quisimos conservar el sonido de jazz y todo en general está bastante orgánico.

Tu versión de “Monitor” de Volován ya venía como track oculto en el disco de ellos, ¿por qué volverlo a incluir aquí?
La verdad es que nos gustó muchísimo cómo quedó y le daba un buen complemento al disco. Y yo creo que lo puse como amuleto de la buena suerte; es como buen augurio. Fue algo que, además está hecho con cuates en plan super chido, porque ni tuve que tratar con nadie de ninguna disquera.

Y cuando estás actuando, ¿qué extrañas de la música?
Extraño mucho el no poder tocar o dedicarme tanto a la composición, pero es algo que siempre me acompaña; siempre estoy escuchando música a todo momento y siempre está ahí.

Tu música podría ser para un soundtrack de…
¡Wow!, pues no lo sé… ¡seguro de una Chick Fleak! (risas). ¡La verdad no tengo ni idea! Yo siempre busqué encontrarme en las canciones e identificarme en algo y me gustaría que mis canciones pudieran hacer lo mismo en alguien.

Ximena Sariñana
Mediocre
Warner
2008

Lejos de la medianía y la insignificancia, Ximena se muestra como una pletórica compositora e intérprete en un recorrido de 12 temas que atraviesan diversos momentos, en su mayoría pop (“Vidas paralelas”, “La tina”), destacando otros por sus fuertes cargas de jazz (“Reforma” y “Pocas palabras”) que imprimen su firma personal. Un disco que fluye gustoso y apetece a la escucha, cuya lírica bien pudiera empatarse con el

monólogo interior de muchas mujeres que disfrutan los pequeños detalles de la vida, pero que también se sumergen en enmarañados piensos. Una propuesta que brinda una buena oportunidad para que muchos se reconcilien con el pop.